El ultrasonido es un equipo que transfiere ondas mecánicas de mayor frecuencia que las del sonido a través de un medio físico (gel), permitiendo su propagación y transmisión de energía (calor profundo) mediante la vibración que producen estas ondas.
Con esta vibración, se genera un movimiento celular que mejora la cicatrización, así como también aumenta la temperatura en la zona aplicada.
En la profundidad de los tejidos, hay pocos o nulos receptores de calor, por lo que el cambio de temperatura causado por el ultrasonido no es percibido por el paciente.
Efectos
Efectos térmicos
- Aumento del metabolismo.
- Mejora de la circulación.
- Reducción del dolor.
- Alivio de espasmos musculares.
- Incremento de la extensibilidad.
Efectos no térmicos
- Aumento de la permeabilidad de membrana.
- Estimulación de la respuesta de macrófagos.
- Incremento de la síntesis de colágeno.
Indicaciones
- Aparato locomotor: distensiones, espasmos musculares.
- Sistema circulatorio y nervioso: distrofia ósea refleja, enfermedad de Raynaud.
- Acción fibrinolítica: cicatrices retráctiles, liberación de adherencias.
Contraindicaciones
- Inflamaciones agudas.
- Fracturas recientes.
- Heridas recientes.
- Cardiopatías.
- Embarazo.
- Presencia de marcapasos.